El ser humano puede experimentar un sinfín de emociones, dentro de este amplio repertorio encontramos emociones positivas tales como alegría y excitación, así como emociones negativas como la tristeza o la ira.
“Aunque pensemos que en el control de las emociones es más importante controlar las negativas, también hay que hacerlo en el caso de las positivas; pues tampoco es sano enfrentarse a la vida con una excesiva excitación y emoción” compartió la Dra. Stephanie Guilá, directora de Boston Clinical Consulting Guatemala, quien cuenta con un Doctorado en Psicología Clínica y más de 20 años de experiencia.
¿Qué
pasa si no controlo mis emociones?
La Dra. Guilá comparte que al dejar que nuestras emociones se apoderen de nuestro ser, nuestra mente dejará de funcionar racionalmente, estaremos a merced de lo que sintamos en cada momento, tomando decisiones completamente impetuosas y nada reflexivas.
Pero ¡ojo! No se puede evitar sentir emociones, ya que existen porque tienen una función evolutiva, un sentido biológico de supervivencia; pero sí podemos aprender a manejarlas.
¿Cómo
manejar adecuadamente mis emociones?
La experta indica que, antes que nada, es importante saber que el reconocer las emociones es el primer paso para generar bienestar. Aprender a regular y expresarlas también tendrá efectos positivos sobre las relaciones interpersonales.
Por ello, es importante adquirir habilidades para reconocer, regular y expresar las propias emociones; para luego identificar las emociones de los demás. Todo este gran trabajo facilitará la comprensión, regulación y prevención de efectos nocivos de las emociones negativas o aflictivas, desarrollando habilidades para generar emociones positivas, que permitan automotivarse y adoptar una actitud positiva ante la vida.
Durante el proceso de identificar una emoción, es necesario reconocer cuándo y por qué me siento así. Por ejemplo: cuándo y por qué me siento enfadado, nervioso o triste; y aquí debemos actuar sobre las causas y no sólo los síntomas.
Enfocarnos en las causas nos permitirá hacer cambios en nuestro entorno, relaciones o en nosotros mismos para no continuar en la misma situación que nos enfadó, nos hizo sentir tristes o nerviosos.
¿Existen
técnicas que me permitan detener una emoción negativa?
¡Claro
que sí! Existen técnicas muy eficaces para detener o frenar esa reacción negativa
en cadena. A continuación la Dra. Guilá comparte cinco:
Recordar
tus virtudes y éxitos. Escribirlas y reconocerlas es importante, quién mejor
que tú para conocerte mejor.
Meditar
habitualmente. Busca un espacio de relajación para sentirte mejor, cárgate de
energía positiva a través de la meditación, yoga o ejercicio.
Escribir
en un diario tus emociones. Escribir lo que sientes te permitirá sacar tus
emociones, si no eres de escribir, haz un diario a través de grabaciones de
audio. Lo importante es desahogarse.
Tomarse
un respiro para recuperar el autocontrol. Date un descanso, sal a caminar,
tomate un café, ve a un spa… cambia de ambiente; permítete un descanso para
empezar de nuevo.
Busca
apoyo profesional. Nunca es tan temprano o tarde para buscar ayuda, en Boston
Clinical Consulting ofrecemos acompañamiento y asesoría en cualquier etapa de
tu vida a través de distintos programas como el Arteterapia o talleres de
inteligencia emocional y construcción del autoestima.