Conocer la frecuencia cardiaca y tener un peso saludable podrían ayudar a prevenir la principal causa de muerte en el mundo
La enfermedad cardiovascular (ECV) cobra la vida de 18.6 millones de personas cada año, considerándose así la principal causa de muerte en el mundo. Esta patología abarca todas las enfermedades que afectan el corazón o los vasos sanguíneos (venas y arterias), así como los padecimientos coronarios y cerebrovasculares. El riesgo de desarrollar ECV aumenta por factores prevenibles como una alimentación poco saludable, inactividad física y exposición al tabaco, que a su vez se relacionan con colesterol elevado, presión arterial alta, diabetes o insuficiencia cardíaca; o por factores que no se pueden modificar como los antecedentes familiares.
Es esencial controlar esos factores de riesgo
modificables, razón por la que, en el marco del Día Mundial del Corazón, se
hace un llamado por medio de la campaña ‘Números que Importan’; liderada por
AstraZeneca; que busca educar y prevenir a la población al tiempo que ofrece
herramientas para entender la importancia de una frecuencia cardíaca controlada
y un peso saludable.
“Lamentablemente, las enfermedades cardiovasculares siguen afectando de igual manera a hombres y mujeres, el incremento de casos diarios ha sido significativo debido a una combinación de factores de riesgo y del poco conocimiento de la enfermedad”, mencionó el Dr. Esteban Coto, director Médico de AstraZeneca para Centroamérica y el Caribe.
Las funciones del corazón se pueden ver
comprometidas por un sinfín de variantes, la frecuencia cardíaca y la
inactividad física son algunas de ellas. Recientemente se han realizado
estudios donde se demuestra que existe una relación entre la frecuencia cardíaca
y el riesgo de muerte, es decir, que entre mayor sea este valor menor será la
expectativa de vida del paciente.
Al nacer, las personas presentan rangos altos
de frecuencia cardíaca que va disminuyendo con el crecimiento, manteniéndose
estable a partir de los 20 años.
Una frecuencia cardíaca normal, ronda entre los 50 y 100 latidos por minuto,
sin embargo, es importante detallar que esta cifra puede verse modificada por
ciertas actividades que se realicen, como el ejercicio o respuesta a diferentes
estímulos como la temperatura, la posición del cuerpo, caminar, estar en
reposo, entre otros.
Relacionado a la inactividad física, esta es la
responsable del 5% de las enfermedades cardiovasculares. Las personas
que no hacen ejercicio tienen entre un 20-30% más de probabilidades de morir
prematuramente que aquellas que sí lo practican.
El sobrepeso u obesidad hace que el corazón trabaje mucho más, vinculándose con
la enfermedad coronaria por su impacto directo sobre el colesterol, además de ser
la causa de la apnea del sueño, provocando a su vez cardiomiopatía.
Según datos de la Organización Panamericana de
la Salud, el sobrepeso u obesidad se ha triplicado desde los años 70 hasta la
actualidad, alcanzando niveles epidémicos y afectando a personas de todas las
edades. La región de las Américas tiene la mayor prevalencia a nivel mundial, pues
un 62.5% de los adultos tienen sobrepeso u obesidad, consecuencia del
aumento de consumo energético versus calorías gastadas, cambios constantes en
los hábitos alimenticios, poca actividad física y múltiples variaciones
ambientales y sociales, combinadas con el poco desarrollo en áreas de salud de
algunos países.
“Existe de forma general una falta de "conciencia" e información hacia las enfermedades cardiovasculares, por lo que invitamos a la población a que estén alerta, que realicen chequeos médicos y conozcan esos números que pueden ocasionar graves problemas de salud. Con “Números que Importan” buscamos aumentar los esfuerzos para prevenir y promover un diagnóstico temprano para el adecuado control regular y periódico de la presión arterial, frecuencia cardíaca, glucosa en sangre, colesterol y un peso saludable, lo que ayudará a cada paciente a tomar decisiones conscientes y evitar complicaciones en el futuro como insuficiencia cardíaca, infartos, derrames cerebrales y enfermedad renal crónica, entre otras,” indicó el Dr. Coto.
Parte de las herramientas para dar ese apoyo a la población, son las calculadoras de riesgo, las cuales se pueden acceder de manera gratuita en los siguientes enlaces https://numerosqueimportan.disfrutomisalud.com/calculadora-cardiaca.html y https://numerosqueimportan.disfrutomisalud.com/calculadora-imc.html. Las personas podrán ingresar sus números, obteniendo un rango de valoración que puede descargarse y analizar con el médico tratante.