Los colchones, almohadas, ropa de cama, cojines, alfombras, así como muchos otros enseres son el ambiente propicio para la proliferación de ácaros, microorganismos que están presentes en el polvo común de los hogares.
“La habitación es uno de los lugares predilectos para su
existencia y reproducción, especialmente en la superficie del colchón; un
ecosistema que favorece las poblaciones de estos artrópodos”, indica un estudio
científico publicado en Bogotá, Colombia (1).
El estudio indagó en 90 hogares de tres localidades
colombianas. A partir de tres seleccionados: colchón, piso y almohada, se
determinó que el colchón fue el lugar con mayor presencia de ácaros, aparentemente
para su desarrollo, crecimiento y reproducción. Quizá debido a su uso tan
frecuente, pues mientras las personas duermen, están descamando y sudando, lo
que genera alimento, humedad y un ambiente propicio para la supervivencia de
los ácaros.
Los ácaros presentes en el polvo generan enfermedades alérgicas
a nivel respiratorio y dermatológico variadas. Se estima que afectan cerca del
20 al 26% de la población mundial, según el estudio. Algunas de las molestias que
pueden provocar son:
- Rinitis, asma o bronquitis
- Dolor de garganta
- Ojos rojos o lagrimeo
- Eczemas en la piel o dermatitis atópica
Medidas de higiene
Por esta razón es importante mantener una higiene adecuada,
especialmente en estos espacios, para mantener alejados a estos molestos
parásitos de su colchón y su dormitorio.
Las medidas de control para acabar con estos microscópicos
bichos deben comenzar con el control e higiene de los ambientes del dormitorio,
por lo que a continuación le dejamos una guía para el cuidado y uso del
colchón, que le ayudarán a proteger y mantener en buen estado el mismo.
Guía para el cuidado del colchón (diseñar un recuadro)
- Retire o minimice los objetos que decoran su dormitorio y son propensos a acumular ácaros, como alfombras o peluches, para evitar que estos se incrusten en el colchón.
- Proteja su cama con un protector de colchón (cobertor). Lo mantendrá limpio y protegerá de derrames u otros accidentes.
- Cambie y lave las sábanas una vez por semana. Se sugiere que los cojines una vez al mes.
- Cambie las almohadas cada dos años.
- Guarde su ropa de vestir y de cama en un armario cerrado.
- Prefiera almohadas y edredones de material sintético. Evite las plumas pues tienen riesgos de acumular ácaros.
- Ventile a diario la habitación, procure que entre luz y sol al dormitorio para reducir la humedad.
Renueve su colchón. Se sugiere hacerlo máximo cada 8 años.
Grupo Diveco ofrece un proceso de sanitización único en
Centroamérica. Funciona por medio de una lámpara de luz ultravioleta -UVC- y
antimicrobial en donde los colchones atraviesan una cámara de aplicación que permite
pulverizar los ácaros de polvo, bacterias, virus, esporas u otros organismos
nocivos que se acumulen en el colchón antes de salir de la fábrica.