A diferencia de hace algunos años, los videojuegos de hoy cuentan con un grado de detalle que a más de uno dejan con la boca abierta, pues ofrecen sonidos envolventes y escenarios tan detallados que pareciera que se está inmerso en un nuevo mundo donde la aventura y la acción casi se pueden oler y sentir. Todo es gracias a la constante batalla entre las grandes compañías desarrolladoras de videojuegos, quienes en el afán de hacer programas cada vez más perfectos terminan por ofrecernos universos que ni en sueños hubiéramos podido imaginar.
En esto hay un aspecto a considerar. Resulta
que a mayor detalle y mejor calidad del videojuego, mayor volumen de memoria
ocupan. Como consecuencia, las consolas terminan por ser devoradas en menos de
lo que uno se imagina, lo que supone problemas logísticos para quien gusta de
juegos fluidos y sin ningún tipo de ralentización.
Un mudo abierto que ha dado pauta a una mayor
demanda de almacenamiento
El 2023 ha sido el año para el lanzamiento de
juegos de universo abierto como Starfield, de Bethesda; sin embargo, muchos se
llevaron la sorpresa de que dicho juego pesa unos 75Gb, más del doble de lo que
en su momento pesó Fallout 4, el cual apenas tenía 30 Gb durante su lanzamiento
en 2015.
Ante este panorama, muchos jugadores se
encuentran con la cruel realidad de que la capacidad de su consola es rebasada
por las nuevas versiones de sus juegos favoritos, con tamaños a veces superiores
a medio terabyte, que es muchísimo más de lo que un Xbox Series S básico puede
procesar. Lo mismo pasa con PlayStation 5 que tiene conflictos para acomodar
otro juego AAA de esta magnitud en su almacenamiento interno, con 667 GB de los
825 GB de la unidad abiertos para archivos de juego. Incluso la PC está comenzando
a tener apuros para alojar juegos de dicho tamaño, lo que muchas veces obliga a
los jugadores a cargar y quitar juegos de sus consolas.
Por fortuna, existen opciones que ayudan a
solventar este reto, como la línea de productos FURY de Kingston y que
ha sido diseñada considerando las demandas técnicas del jugador contemporáneo.
No solo se trata de mayor almacenamiento sino también de eficiencia y rapidez,
y en ese sentido el SSD
NVMe PCIe 4.0 M.2 Kingston FURY Renegade alcanza asombrosas velocidades de
hasta 7.300 MB/s en lectura y 7.000 MB/s en escritura. Algo que los jugadores
de PS5 y PC agradecen, ya que pueden ejecutar los juegos directamente desde el
almacenamiento adicional.
Conscientes de que el manejo de grandes dimensiones de información a muy alta velocidad implica también el riesgo de sobrecalentamiento, Kingston ha procurado que sus productos cuenten con dispersor térmico de aluminio y grafeno, lo que le permite funcionar con elevada intensidad durante más tiempo con una mejor gestión del calor. Perfecto para sesiones prolongadas o de elevado uso, como en los juegos
En el caso de los propietarios de Xbox, si bien
no pueden ejecutar los juegos de la actual generación desde discos externos, lo
cierto es que esto no implica que no puedan recurrir al almacenamiento
adicional. La verdad es que los títulos de Xbox de generaciones anteriores
pueden ser almacenados como soporte o guardarse si no se ejecutan asiduamente.
Y en ese sentido los SSD externos son perfectos. El SSD
externo XS2000 se caracteriza por el rendimiento de USB 3.2 Gen2x2,
alcanzando impresionantes velocidades de lectura y escritura de 2.000 MB/s, y
tiene una capacidad de almacenamiento sustancial, considerando su pequeño
factor de forma, altamente portátil.
Finalmente, los jugadores de Switch tienen la
ventaja de contar con una consola portátil híbrida que cuenta con una ranura de
tarjeta SD. Esta opción permite que sus propietarios puedan interactuar con
tarjetas SD de hasta 2 Tb, como tarjeta
microSD Kingston Canvas Go! Plus, una excelente opción para de los usuarios
de Switch con velocidades de lectura de 170 MB/s, y de escritura de 90 MB/s,
compatibles con tarjetas de mayor capacidad, y capacidades desde 64 GB hasta
512 GB.
Lo cierto es que mientras los juegos sigan
aumentando de tamaño, el sector siempre se adaptará a las demandas de hardware
que se requieran y Kingston continuará ofreciendo soluciones para ayudar a los
gamers a continuar disfrutando de sus juegos favoritos.